DTYWY 37: Malentendido

Capítulo 37: Malentendido

Lector Beta: My_Own_Worst_NPC

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♢ Punto de vista de Lotte

Lotte levantó con cuidado a Shirou dormido, y él, en respuesta inconsciente, se aferró a ella.

El rostro de Shirou quedó presionado sobre el pecho de Lotte, sobre su corazón, y la sensación de sus labios y su cálido aliento en su cuerpo la llenó de tristeza al recordar lo sucedido antes.

En ese mundo, llevar a un hombre de esa manera se llama Cargar al príncipe [1]. Lotte nunca imaginó que llevaría a Shirou así.

—Voy a llevar a Okami a su habitación, abran la puerta.

Lotte era plenamente consciente de que las demás oficiales la miraban con envidia mientras sostenía a Shirou en sus brazos, pero no tenía ninguna intención de soltarlo ahora.

Los golems no reaccionaron cuando se llevaron a Shirou. Tenían la orden de no intervenir a menos que Shirou fuera atacado, así que incluso si lo desnudaran allí mismo, los golems solo observarían.

El descuido de Shirou fue no considerar la posibilidad de quedar inconsciente.

Era la primera vez en mucho tiempo que una mujer entraba en la habitación de Shirou, en el fondo de la cueva…

—Wow… así es la habitación de un hombre.

—Huele bien, ¿no crees?

—Mucho. Todo el lugar está lleno del aroma de Okami. Oh, esto es malo, creo que me estoy mojando…

Las oficiales miraban alrededor asombradas por este reino prohibido.

—Oigan, miren la cama de Okami. ¿No les parece demasiado grande para una sola persona? Es como si estuviera hecha para que alguien durmiera con él…

Claro que era enorme, la Princesa Christiana la había hecho tamaño king-size para que pudieran moverse libremente juntos. En ese entonces, era solo una losa de piedra cubierta con hojas de palma, pero ahora tenía un colchón y sábanas que Shirou había creado con magia.

—No puedo contenerme, esta puede ser mi única oportunidad de dormir en una cama así —murmuró emocionada una de las oficiales, hasta que Lotte las calló con una reprimenda.

—Dejen de decir tonterías y quítense del camino, voy a ponerlo en la cama —Lotte lanzó una mirada fría a la oficial ofensora.

Lentamente, como si manipulara un tesoro precioso, Lotte acostó a Shirou en la cama. Solo Lane y las oficiales podían ver la profunda expresión de anhelo en su rostro.

—Mmmmm… oh, ¿esta es mi cama? —murmuró Shirou medio dormido y borracho.

—Así es, esta es tu cama —respondió Lotte en un susurro mientras lo cubría con una manta delgada.

—Mmm… esta noche… tengo mucho sueño… Mañana… haré mi mejor esfuerzo…

Shirou rodeó el cuello de Lotte mientras ella lo arropaba y la atrajo hacia él.

Y luego, así como así, presionó su boca contra la de ella y metió su lengua en la boca de Lotte como si fuera lo más natural del mundo.

—¡¡Mmmphh!!

La lengua de Shirou se entrelazó con la de Lotte en un beso apasionado, acariciando el suave interior de su boca. Aturdida, ella no podía moverse.

—Haaahhh…… Buenas noches… Chris-sa…ma…

Sus palabras le dolieron en el corazón; por un lado, la sensación física de su beso era más fuerte y erótica de lo que jamás había imaginado, pero por otro, la realidad del momento pesaba en su mente.

Shirou no me besó a mí.

Estaba besando a la mujer en su sueño, una persona llamada Chris.

Entonces, ¿A dónde deberían ir mis sentimientos?

—Un beso tan intenso… ¡Es la primera vez que veo a alguien besar así!

—Esto es malo… Me estoy mojando de verdad…

Los murmullos emocionados de las oficiales llenaban la habitación, pero Lotte permaneció ajena.

—Todas, nos vamos ahora. ¿Cuánto tiempo piensan merodeando en la habitación de un hombre? —La orden de Dianne fue tajante, haciendo que las soldados se retiraran, aunque de mala gana.

Cheryl, que las había seguido y observado desde la puerta, escapó antes de que las demás la notaran.

—Bueno, eso fue inesperado —Dianne rió nerviosa, pero su comandante permaneció en silencio. Pensó que era natural que Lotte estuviera tan conmocionada por la audacia de Shirou; incluso Dianne, con toda su experiencia, nunca había visto a un hombre besar así.

Dada su timidez, probablemente había sido el primer beso de Lotte, y recibir eso como primer beso, bueno…

—Gram-sama, es hora de que nos vayamos también —Dianne sacudió los hombros de Lotte, sacándola de su ensueño.

—¿Eh? ¿Qué?

—Vamos, debemos irnos.

—S-sí, tienes razón.

A pesar de decirlo, las piernas de Lotte aún no se movían. Mirando a Shirou, que dormía plácidamente, Lotte llamó a su subordinada.

—Dianne…

—¿Sí, comandante?

—Notifica a todas las tropas. A partir de ahora, está estrictamente prohibido dar alcohol a Okami. Quienes rompan esta regla serán severamente castigados.

—Entendido. Personalmente, creo que es una muy buena idea.

—Y ustedes —volvió su mirada a los golems—, deberían vigilar más de cerca a Shirou también.

Claro, los golems permanecieron en silencio sin responder.

♢ Punto de vista de Shirou

Me duele la cabeza.

Me desperté a la hora habitual, pero mi cabeza palpitaba y mi boca estaba árida y desagradablemente seca.

—Goku, tráeme una taza con agua…

El analgésico que cree parecía una solución obvia para la resaca, así que tomé una tableta. Honestamente, nunca esperé ser el sujeto de prueba. Afortunadamente, el medicamento fue efectivo y, en segundos, el dolor de cabeza desapareció.

Desafortunadamente, no hizo nada por mi malestar estomacal. No puedo crear medicina para el estómago hasta alcanzar el nivel tres en producción médica, y como quería experimentar mucho con comida en el futuro, necesitaría priorizar esta categoría.

…

Realmente quería ducharme, pero no tenía nada parecido ahora. ¿Cómo podría hacer una ducha? ¿Tal vez perforar agujeros en un balde, llenarlo con agua caliente y decirle a Iwao que lo levante?

¡Oh, eso podría funcionar!

Estoy seguro de que Gram y las demás estarían felices de probarlo también. Como alguien de la industria hotelera, es mi trabajo hacer felices a mis huéspedes, ¡y no tiene nada que ver con querer ver a Gram o Dianne en la ducha! ¡Nada en absoluto!

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Mientras me lavaba la cara en el arroyo, noté que las invitadas ya se estaban despertando.

—¡Buenos días! Gracias al medicamento, ya no tenía resaca, así que estaba seguro de que les di un saludo adecuado. Sin embargo, Gram rápidamente apartó la mirada cuando la saludé, su rostro enrojecido.

—¿Disculpa, pasa algo?

—N-no… buenos días. —Gram procedió a lavarse la cara en el arroyo y no dijo nada más.

¿Hm? ¿Hice algo mal?

—Buenos días, Okami. —Lane apareció en el arroyo poco después.

—Buenos días a ti también, Lane-san.

—Estoy ansiosa por trabajar juntos de nuevo hoy. Nuestra exploración comenzará desde la puerta del primer sótano, pero primero necesitaremos que Iwao retire la barricada que apilamos ayer. Ah, y sobre lo de ayer…

¿Ayer qué?

—Las cosas que me dijiste anoche me hicieron muy feliz. Que un hombre como tú dijera que, por mí, iría al fuego, al mar o a una mazmorra, me hizo sentir como la mujer más afortunada. Si fuera 10 años más joven, consideraría seriamente abandonar mi posición para quedarme en esta isla y vivir el resto de mi vida contigo.

Uuuhhh… espera, ¿realmente dije eso…?

…Mi memoria de anoche es borrosa… pero creo que dije algo así…

¡Estúpido!

Soy tan estúpido. ¡Estúpido, estúpido, estúpido, estúpido, soy un idiota!

¿Por qué bebí tanto vino anoche?

No veo cómo aclarar las cosas sin ofenderla… Supongo que solo puedo hacer mi mejor esfuerzo de ahora en adelante.

—Eso aparte, Okami, eh, sobre lo que dijiste anoche…

—¿Eh? Umm, ¿hice otra promesa?

—No… ¿no recuerdas lo que pasó?

—¿Hice… hice algo? —Intenté recordar, pero solo tenía un vago recuerdo de decir que las ayudaría de nuevo con la mazmorra… todo lo demás estaba borroso.

Mientras tanto, Lane tenía una expresión preocupada.

—…Mis condolencias, parece que Okami ha pasado por muchas dificultades.

¿Dificultades?

—Quiero decir… escuché que tu esposa falleció. Se llamaba Chris, ¿verdad?

…¡

¡Esto es malo! ¿Abrí la boca sin cuidado y les hablé de Chris cuando estaba borracho anoche? ¡Si descubren que Chris era del Reino de Regalta, enemigo del imperio… oh no, ¿qué dije?

Espera… un momento… ¿por qué creen que Chris es mi esposa? ¿O más bien, era? ¿Creen que está muerta?

—No dudes en acudir a mí si algo te inquieta. Prometo hacer lo que pueda para ayudarte.

—¿Será que hice algo cuando estaba borracho anoche?

—En realidad —Lane soltó un suspiro—, besaste a Gram-sama anoche. Estabas tan borracho que la confundiste con tu difunta esposa.

¿¡Hice qué!?

Ahora entendía por qué evitaba el contacto visual. Debía disculparme con ella después. Haahh… la regué mucho…

Lo peor es que, aunque tuve la suerte de besarla, no recuerdo nada en absoluto. Qué decepción.

Me siento tan decepcionado de mí mismo. Necesito una autorreflexión muy, muy larga.

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Después de eso, le pregunté a otra oficial sobre los eventos de la noche anterior; parece que todos tienen la impresión de que soy viudo. Mi esposa había fallecido trágicamente.

Y más tarde ese día, tres mujeres intentaron seducirme.

Parece que, en el imperio, la idea de un hombre viudo que tiene que mantener un negocio solo para sobrevivir es un escenario popular en fantasías eróticas.

No se me ocurrió una buena explicación para aclarar el malentendido, así que lo dejé así.

…Me pregunto si llegaré a arrepentirme de esto.

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[1] No estoy 100% seguro, pero es casi seguro que es el equivalente al Cargar a la princesa, solo que hecho por una mujer a un hombre.