Capítulo 84: Hoy cerramos nuestro negocio
Lector Beta: My_Own_Worst_NPC
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Fue una batalla agotadora y dura para mí.
Gracias a la armadura mágica, mi poder de ataque estaba por las nubes, y mis reflejos y visión dinámica probablemente eran 10 veces mejores de lo normal.
Pero sabes, aunque solo fueran monstruos, era la primera vez que mataba, y la cantidad de monstruos que nos atacaban era incontable. Casi habían acabado con los golems que traje conmigo: de 32 Wonders, solo quedaban 4, y de 24 Harrys, solo 2 seguían intactos.
Todos ustedes... hicieron su mejor esfuerzo y un gran trabajo...
Fueron bajas pesadas, pero finalmente logramos derrotar al jefe del piso, los Mil Ogros.
Después de que todos los monstruos murieron, la amplia sala quedó en silencio, y en medio de todo, Miina finalmente se desplomó sentada del agotamiento.
—Se... acabó... Todo terminó ahora... —dijo Miina jadeando.
—Sí, y espero no volver a experimentar algo así nunca más.
Solo me quedaban 238 MP; si el combate hubiera continuado, me habría quedado sin maná en cuatro minutos.
—¿De qué hablas, Okami-san? Parecía que podías matar a los monstruos con bastante facilidad.
—Eso no es cierto. Estaba muy nervioso, pensé que me desmayaría. La armadura Eminence Rock puede mejorar mis atributos físicos, pero no reforzó mi espíritu.
Aunque la batalla ya terminó, todavía no puedo dejar de temblar. Además del agotamiento, mi estómago está hinchado por tantas pociones de MP que bebí.
—¡Okami-san, ánimo! ¡Logramos derrotar al jefe del piso! ¡Mira, allá! —Miina señaló un pequeño cofre del tesoro más adelante.
Era una caja blanca con decoraciones doradas, y se veía muy llamativa. Era el doble de grande que una caja de cartón de mandarinas.
Quería revisar el contenido del cofre de inmediato, pero en el momento en que me quité el Eminence Rock, mi cuerpo de repente se sintió pesado como una roca y no podía moverme bien. Era como si hubiera estado jugando en el océano durante dos horas y luego saliera a la playa. Mi cuerpo pesaba como plomo, y el sudor brotaba de golpe.
—Mi cuerpo... se siente tan pesado...
—Aquí, agárrate de mí.
Tambaleándome, Miina rápidamente vino a mi lado y me sostuvo. Solo pude sonreír con amargura ante lo indefenso que realmente soy.
—Sabes, Okami-san. Los aventureros vivimos por momentos como este. El momento en que superamos las dificultades de la mazmorra y conseguimos un cofre del tesoro.
Con brillo en los ojos, Miina revisó si había trampas alrededor del cofre. Parecía que también era su primera vez abriendo un cofre dejado por un jefe de piso.
—Está bien, no hay trampas. Lo abriré ahora.
Por precaución, volví a equipar el Eminence Rock.
—Bien, aquí va...
Suavemente, sin ningún sonido, la tapa se abrió sin esfuerzo.
—Ooohhh...! —Los dos suspiramos asombrados al mismo tiempo.
El cofre del tesoro estaba lleno de piedras mágicas y barras de oro. Las barras de oro tenían forma de kamaboko (pastel de pescado) [1], y había siete.
—¡Cada una de estas vale 30 millones de lehmens! —Miina levantó una de las barras de oro con manos temblorosas.
Las piedras mágicas también estaban alineadas en filas, y sobre las barras de oro y las piedras mágicas, había una pequeña estatua de piedra. Medía solo unos 20 centímetros de alto y parecía un joven encadenado.
—¡Okami-san! ¡Rápido! ¡Evalúalo! ¡Debe ser un tesoro raro!
En realidad, no es una habilidad de Evaluar, sino de Reparación.
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Objetivo de reparación: Ángel Cautivo
Descripción: Lleva al usuario a cualquier lugar que haya visitado. Puede llevar a un compañero.
Consumo de MP: –
Tiempo de reparación: No es necesaria.
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¡Guau! ¡Este es un objeto realmente útil! Sin mencionar que casi no me quedaba energía para moverme debido al agotamiento.
—¿Lograste evaluarlo? ¿Qué tipo de artefacto es?
—Parece un objeto imbuido con magia de teletransportación.
—¿Eh? ¿Magia de teletransportación?
Según Miina, nunca había oído hablar de tal magia, ni de nadie que la usara en este mundo. Si eso es cierto, significa que esta magia es aún más valiosa de lo que pensaba.
—De todos modos, volvamos. No hay forma de saber si vendrán más monstruos aquí.
—Bueno, entonces usemos este Ángel Cautivo de inmediato. No creo que pueda dar otro paso ahora mismo.
—¡Buena idea! ¡Salgamos de esta mazmorra primero!
...
En ese momento, pensé que estaría bien usarlo de inmediato, pero resultó que estaba terriblemente equivocado. Probablemente debido al agotamiento, no podía pensar con claridad en ese momento.
Y así, sin pensar en las consecuencias, usé el Ángel Cautivo para teletransportarnos fuera de la mazmorra...
...justo a la entrada de la mazmorra. Así es, aparecimos frente a los ojos de la Maestra Elza y los demás aventureros que vigilaban la entrada.
Al vernos repentinamente rodeados, creo que tanto Miina como yo pusimos caras tontas en ese momento. Mientras tanto, la gente alrededor nos miraba con la boca abierta.
—Okami... ¿Cómo aparecieron de repente aquí? No, más bien, ¿no se suponía que estaban dentro de la mazmorra?
—Ah... Uhh...
¿Cómo puedo engañarlos y mantener esto oculto?
Estaba a punto de fingir que algo inexplicable había sucedido en la mazmorra y que de alguna manera nos teletransportamos de vuelta a la superficie, pero... [2]
—¡Todo está bien ahora! ¡Okami-san derrotó al cuerpo principal de los Mil Ogros! ¡No hay más peligro de estampida!
¡Miina, tonta...! ¡Van a descubrir que robé el Bastón de La Messeine a este paso!
Me lamentaba internamente, pero la gente a mi alrededor vitoreaba en voz alta.
—¡Estamos salvados!
—¡¡Ooooohhhhh!!
—¡Okamii–, eres el mejor!
—¡¡O-ka-mi! ¡¡O-ka-mi!!
Estallaron vítores aún más fuertes, gritando "Okami", así que no tuve más remedio que saludar con la mano con una sonrisa tensa mientras sentía que me vendría un dolor de estómago.
—Miina, me voy a escapar de aquí. —Le hablé a Miina en voz baja.
—¿Eh? ¿De qué hablas, Okami-san? Eres un héroe, ¿sabes? Estoy segura de que el gremio te dará una recompensa.
—Nunca quise ser un héroe. Además, podrían no verme como un héroe, sino como un ladrón.
—¿Un ladrón? ¿Qué quieres...? Oh... ¡AAH!
Parece que Miina finalmente lo entendió.
—E-entonces, ¿qué vas a hacer ahora?
—Por ahora, voy a regresar a casa y empacar mis pertenencias.
—Entonces, voy contigo.
—¿Por qué?
—Será problemático si me acusan de cómplice. Además, todavía está esa promesa.
¿Promesa? Cuál... ah, cierto.
—Espera, ¿en serio quieres venir conmigo?
—¡Por supuesto que sí! ¡Y no me importa ser una fugitiva si eso significa que puedo perder mi virginidad contigo, Okami-san! [3] Ah, pero ya era culpable de falsificar documentos oficiales en el Reino de Ragusel, así que técnicamente ya era una fugitiva.
—¡Miina! ¿Eras una criminal?
—¿Hm? Sí. Después de todo, la mayoría de los aventureros aquí son criminales, Okami-san. Rouge también era buscada por asesinato.
Fue un hecho impactante para mí; no tenía idea. Pero ahora que lo pienso, Cecily también era una pirata. Si se descubriera, las autoridades la atraparían.
—Entonces, ¿puedo ir contigo o no?
—Bueno... está bien. Pero preguntémosle a Rouge si quiere escapar con nosotros.
—¡Bien, sí! ¡Finalmente, el día en que me convertiré en una mujer de verdad está llegando! —Miina corrió, buscando a Rouge, con una expresión feliz en su rostro.
...
La Maestra Elza abrió paso entre la multitud y se acercó a mí. —Entonces, ¿qué pasó realmente ahí dentro? Cuéntame todo con detalles.
—No me importa, pero este lugar es demasiado ruidoso y lleno de gente. Iré al gremio después de limpiarme y cambiarme, ¿puedes esperarme allí?
La verdad es que estaba empapado en sudor hasta el punto de que mi camisa se volvió transparente, y hice la petición mientras fingía esforzarme por cubrir mi pecho. Al ver eso, la Maestra Elza asintió.
—Ciertamente, tu apariencia podría distraer a las mujeres del gremio. Muy bien, ve y cámbiate rápido.
Bien. Con esto, logré ganar algo de tiempo.
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De vuelta en la cueva, Miina y Rouge habían comenzado a empacar.
—Shirou-san, escuché que vas a huir de la isla.
Parece que Rouge había escuchado la situación de Miina.
—Así es. Miina dijo que podrían verme como un héroe, pero no me importa. Incluso si lo hacen, el Imperio podría terminar usándome como una herramienta. Me gusta crear herramientas, no que me usen como una.
Rouge se rió al oír eso.
—Entiendo. Iré contigo, Shirou-san. Puede que no lo parezca, pero tengo confianza en mi habilidad para escapar. Además, tengo confianza en el tamaño de mis pechos. Te mostraré el as bajo mi pecho.
Mira, ya te lo dije antes, pero es "as bajo la manga", no "bajo el pecho". Aunque, he visto tus pechos y debo decir que tienes el tamaño para respaldar tu afirmación.
...
Luego, puse en modo de suspensión a los golems que dejé en la isla. Mi barco es pequeño, así que solo puedo llevar dos de cada tipo.
—Gracias por todo.
Los puse en modo de suspensión mientras les daba las gracias. No creo que vuelva a esta isla nunca más.
Habían pasado menos de un año, pero tenía muchos buenos recuerdos. [4]
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Suspiré aliviado cuando finalmente llegamos a mar abierto.
El único barco disponible en la isla era el buque mercante de Madame Damas, así que estoy seguro de que no nos perseguirán. Bueno, incluso si lo hicieran, no habría forma de que alcanzaran un barco remolcado por los Cimas.
—Entonces, ¿a dónde vamos?
—Por ahora, vayamos a la Isla Occidental.
Necesito recuperar el oro y las piedras mágicas que escondí allí.
—¿Y después?
—Mmm... ¿Tal vez podríamos ir hacia la Región de Bawanda? Conozco a alguien allí.
—Alguien que conoces, eh... ¿Qué tipo de persona es?
—Es la Princesa Guerrera de Regalta.
—¿Huuuh?
Sin embargo, no sé si sea apropiado depender de Chris de repente, después de todo este tiempo...
Pero, de nuevo, no estoy seguro de querer ir de viaje errante en busca de Sierra.
—De todos modos, vayamos al oeste por ahora.
Y lo que haríamos después... Bueno, el sol poniente brilla intensamente, no siento que pueda pensar ni planear nada más en este momento. [5]
Solo una cosa es segura.
Hoy, cerramos nuestro negocio en la posada.
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Notas:
Tiene esta forma:
[Imagen de una barra de oro con forma de kamaboko]
Me parece la forma aproximada de un lingote de oro.
No creo que ese razonamiento resista un escrutinio minucioso...
Miina, veo que también eres una mujer de cultura...
¿Solo menos de un año? Pensé que llevaba al menos un año y medio en esa isla...
"Siguiendo la luz del sol, dejamos el Viejo Mundo" — Colón —
Nota adicional: Este es el último capítulo del arco de la posada. Shirou está dejando la isla, y la historia ya no será sobre él trabajando como propietario (Okami) de la posada. El próximo arco será "¿No una santa, sino un santo? Excursión al Norte".
Este capítulo se siente apresurado, sin embargo. Yo, por ejemplo, esperaba uno o dos capítulos mostrando lo genial de Shirou al lidiar con el jefe del piso, así que se siente un poco decepcionante. Algunos de ustedes pensaron (incorrectamente) que el Gusano Blanco seguía vivo y estaba usando el artefacto para controlar a los monstruos y capturar a Shirou. Una trama interesante, y si el escritor hubiera ido por ese camino, creo que habría sido más emocionante. Yo mismo siento un poco de pena por ella, ya que parece tener un trasfondo trágico, y me habría gustado que fuera un arco de redención para ella, pero no estaba destinado a ser.
Además, al momento de escribir este capítulo, la historia de la novela web sigue en pausa en el Capítulo 120, así que solo nos quedan 36 capítulos.
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